Celler Pardas Hermós Brut Nature 2019

Desde 2016, año de su fundación, Celler Pardas forma parte de una tradición antiquísima. Esta bodega, ubicada en el Penedés, ya lleva casi una década elaborando vinos tranquilos, fiel reflejo del territorio. En esta zona del Penedès Superior, al sur de Barcelona (en el noreste de España), la elaboración de espumosos es más una obligación que una elección. Y por eso, ello no aguantaron mucho sin crear su propio espumoso. Dos años después, en 2018, nacía Pardas Hermós Brut Nature, las primera burbujas de Celler Pardas.

Desde el principio Pardas Hermós Brut Nature aparece bajo el sello de Corpinnat, una nueva agrupación de elaboradores que desde 2017 luchan por mantener y reconocer la calidad de espumosos elaborados en el Penedés. Desde entonces estos productores (de los seis fundadores ampliaron a los once actuales) se desvinculan de otras denominaciones de la zona, defendiendo siempre principios básicos como la cosecha manual, vinificaciones en la propiedad, largas crianzas y procesos totalmente ecológicos. Todos estos requisitos se cumplen en Celler Pardas. En concreto, las uvas de Pardas Hermós Brut Nature se cultivan en tres viñedos (Viña el Mus, Viña l’Agustina y Viña el Serrat del Titet), todos ellos cultivados ecológicamente, sin herbicidas ni productos químicos. El suelo tampoco se labra y las cubiertas de vegetación espontáneas son un must en el ciclo vegetativo de estas parcelas. La elaboración también será propia, con una vendimia manual (especialmente selectiva) que se trabajará en las bodegas de la finca.

Pardas Hermós Brut Nature es un coupage de sumoll y xarel·lo, dos variedades autóctonas y muy importantes en la zona. Ambas, especialmente la sumoll, son base en la mayoría de los vinos tranquilos, quedando un poco más relegada en el caso de los espumosos. Ahora en Celler Pardas quieren invertir las tuercas, dándole un lugar central a esta variedad tinta -tan poco usada para las burbujas- con Pardas Hermós Brut Nature.

La elaboración de Pardas Hermós Brut Nature comienza con el prensado directo de las uvas. El mosto obtenido pasará a los depósitos de acero inoxidable donde Pardas Hermós Brut Nature fermentará. Aquí el vino base pasará unos seis meses en reposo, hasta que llegue el momento de embotellarlo. Con esto comenzará una segunda fase, donde Pardas Hermós Brut Nature pasará unos 36 meses en botella. En este tiempo, el vino realizará una segunda fermentación, consiguiendo así las conocidas burbujas. Por último, y tras el degüelle, Pardas Hermós Brut Nature se vuelve a embotellar (sin añadir licor de expedición) y se pone a la venta.

Tal y como dicen en Celler Pardas, en 2018 la tradición llamó a su puerta y no supieron decir que no. Ellos se atrevieron con la elaboración de los espumosos. ¿Y tú? ¿Te atreves con Pardas Hermós Brut Nature?