Características Delaire Graff Chenin Blanc Swartland Reserve
Delaire Graff Chenin Blanc Swartland Reserve es la apuesta que la bodega Delaire realiza para disfrutar del verano. Este blanco, elaborado en Stellenbosch -la región vitivinícola localizada al suroeste de Sudáfrica (a tan sólo 1 hora de Ciudad del Cabo)- llega directo desde estos viñedos que fueron comprados en 2003 por Laurence Graff, el joyero inglés fundador de Graff Diamonds, proveedor de joyería y empresario multimillonario, quien ha conseguido convertir este enclave en uno de los destinos de lujo más codiciados y exclusivos del mundo.
Junto al resort de hoteles, spas, tiendas y restaurantes de lujo que se han construido en el Ward Banghoek (justo en el valle de Helshoetge Pass), este multimillonario continúa cultivando las 20 hectáreas de viñedo. Allí, sobre suelos graníticos pobres y bien drenados (donde las raíces de las cepas tienen que buscar el agua subterránea), junto con los días cálidos y soleados (que hacen maduras las uvas), y las brisas costeras de la tarde y las noches frescas (que ayudan a retener la frescura y la acidez), variedades como la chenin blanc crecen de formas más que satisfactoria. El origen de esta uva, de cuyo cultivo ya se tiene constancia en la Edad Media en la abadía benedictina de Glanfeuil (Anjou), hay que buscarlo en Turena, donde el abad Cormery la implantó en las laderas del monte Chenin. De allí salió con los hugonotes, en el siglo XVII, quienes en su colonización en el sur de África la convirtieron en una de las variedades más tradicionales de la zona.
El resultado son vinos muy valorados, que alcanzan los precios más altos de Sudáfrica, sinónimos de lujo y exclusividad, como Delaire Graff Chenin Blanc Swartland Reserve. Para su elaboración, la vendimia se realizó a mano y por la madrugada. En este proceso, la selección es fundamental, escogiendo las mejores bayas de los viñedos antiguos (entre 30 y 40 años) de la región de Swartland.
Esta exclusiva selección, al frente de la que se encuentra el enólogo Morné Vrey, se mantiene a la llegada de la uva a la bodega, donde sólo se escogen los mejores racimos. Los ramilletes pasan enteros a la prensa, donde serán estrujados suavemente. Una vez extraído el mosto, Delaire Graff Chenin Blanc Swartland Reserve pasa a los depósitos de fermentación, donde estará unas 3 semanas. Tras el trabajo de las levaduras, el vino se deja un tiempo sobre sus lías. La fase final de la crianza,- que durará 10 meses- se producirá en dos tipos de barrica: un 60% de la producción en barricas de roble francés de 400 litros; el otro 40% lo hará en foudres de 2.500 de litros.





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