Domaine Weinbach Riesling Cuvée Colette 2020

Todo vino cuenta una historia. Y quien te diga lo contrario miente. Si eres una de esas personas que te gusta conocer los giros del destino que llevan a la creación de una u otra botella, sin duda alguna tu bodega es Domaine Weinbach.

En el norte de Alsacia, a los pies de la colina Schlossberg (con la consideración de Grand Crû), se encuentra esta empresa, totalmente familiar, que escribe su historia a golpe de vino, cata y etiqueta. La mayoría de sus elaboraciones rinden homenaje a alguno de sus miembros, bautizando el nombre de las botellas que guardan los vinos más especiales de la casa. Colette Faller, -esposa de Théo Faller y madre de Catherine Faller (actual propietaria) es la protagonista de Domaine Weinbach Riesling Cuvée Colette. Al fin y al cabo cualquier cosa es poco para una madre. Y más teniendo en cuenta que Colette Faller fue una madre que se puso al frente de la bodega familiar a la muerte de su marido. Junto a ellas estaban sus hijas Catherine y Laurence (fallecida en el 2014) y juntas consiguieron mantener el estatus, la fama y la calidad de la bodega familiar. Poca cosa. Gracias a Colette se logró que la riesling (una de las variedad típicas de esta zona del norte de Francia) conservara su calidad y su aroma tan único y especial. En concreto esta variedad es la verdadera gloria de Alsacia, siendo la favorita entre la mayoría de los viticultores. De hecho en la colina de Schlossberg es la variedad reina (ocupando un 75% de la zona). Esto se debe principalmente a los suelos graníticos que retienen perfectamente el calor, asegurando que la riesling madure correctamente en los viñedos viejos de más 50 años que posee esta propiedad.

En esta zona Domaine Weinbach tiene 38 hectáreas que cultiva de forma biodinámica. Pioneros en la ecología, durante algunos años esta empresa combinó los cuidados orgánicos con las prácticas biodinámicas. Finalmente, estas últimas son las que se impusieron tras demostrar y comprobar que era la mejor forma de cultivo para conseguir la expresión más pura de cada uno de los viñedos. Evidentemente, todos los trabajos son manuales. Y la vendimia -el más importante de todos ellos- no iba a ser menos. Tras una exhaustiva selección Domaine Weinbach Riesling Cuvée Colette llega a bodega y se prensa suavemente, ejerciendo poca fuerza y consiguiendo un mosto limpio y de calidad. Desde aquí el zumo de uva obtenido se encuba directamente a las barricas de roble donde Domaine Weinbach Riesling Cuvée Colette fermentará. Actualmente, muchas bodegas alsacianas van cambiando este material por el acero inoxidable. Sin embargo, en Domaine Weinbach se continúa trabajando con él, siendo una seña de identidad de la casa. Hasta el final de la elaboración, la madera será relevante, ya que Domaine Weinbach Riesling Cuvée Colette pasará entre ocho y diez meses (depende de la añada) reposando en este material.

A modo de capítulo, cada copa de Domaine Weinbach Riesling Cuvée Colette te meterá de lleno en la historia de esta familia. Haznos caso. Ni una seria de Netflix te mantendrá tan enganchado.