Jean-Marc Brocard Chablis 1er Cru Fourchaume 2018

Todos tenemos un mentor que nos ha dejado huella en nuestras vidas y que nos ha llevado a ser quien ahora somos. En el caso de Jean-Marc Brocard, hijo de agricultores, su vida cambió cuando conoció a Louis Petit. Un viticultor del que, bajo el lema “observa, calla y aprende”, recibió a lo largo de dos años de aprendizaje todo lo necesario para respetar y amar el viñedo. Si a eso le sumamos el encuentro con su futura esposa y su familia política, viticultores de Saint-Bris-le-Vineux, es así como crea su propio proyecto en la finca familiar en Chaudenay-le-Château bajo su propio nombre. Más tarde, en 1973 nace su hijo Julien Brocard y, tras estudiar ingeniería, se incorpora al dominio para trabajar junto a su padre en 1995 bajo una visión biodinámica y con métodos ancestrales. Como resultado, en la actualidad, se trata de uno de los dominios ecológicos más importantes de Borgoña, que ofrece una amplia gama de vinos de Chablis, así como otros blancos y tintos.

Entre sus vinos más alabados, nos encontramos con este Jean-Marc Brocard Chablis 1er Cru Fourchaume. Integrado en la AOC Chablis Premier Cru, se trata de un premier cru compuesto de piedra caliza cuyos viñedos de chardonnay tienen una exposición solar inmejorable. Se trabaja en ecológico respetando al máximo el viñedo y, una vez la uva alcanza su momento óptimo de maduración, se vendimia y traslada inmediatamente a la bodega para conservar todas las características intrínsecas de la uva. Se lleva a cabo una vinificación tradicional. Primero se selecciona y despalilla la fruta y, una vez prensada, el mosto obtenido pasa a fermentar en depósitos de acero inoxidable a temperaturas controladas con una fermentación maloláctica completa. Allí permanece con sus lías durante 8-10 meses antes de ser comercializado.

Como resultado se obtiene Jean-Marc Brocard Chablis 1er Cru Fourchaume. Un vino que, tal y como predicaba el propio Louis Petit, nace a partir de la observación, el silencio y el aprendizaje que te ofrece la propia viña. Un Chablis magistral con un poder sorprendente y una elegancia excepcional.