Masciarelli Marina Cvetic Chardonnay Colline Teatine 2020

Los productos italianos son conocidos en el mundo entero por su atractivo estético y su alta calidad. “Made in Italy” se ha convertido en una especie de marca y muchos han sido los que han sabido posicionarse en lo más alto. Es el caso de Masciarelli Tenute Agricole, símbolo del vino italiano y protagonista del éxito de la producción moderna de vino en Abruzzo. Una bodega que actualmente es llevada por Marina Cvetic, socia y esposa de su fundador Gianni Maciarelli, y que con sus vinos sigue manteniendo la expresión genuina de tan complejo territorio. Basándose en esta riqueza de terroirs, microclimas y uvas, en 1991 el tándem Gianni-Marina crea una línea de vinos que se caracteriza por la presencia de variedades de uva puras internacionales como merlot, cabernet sauvignon y chardonnay junto a las variedades autóctonas por excelencia montepulciano y trebbiano. Unos vinos estructurados y elegantes que desde entonces se han convertido en la delicia de los paladares más exigentes.

Pero para la creación de estos vinos con las variedades foráneas, primero se debía llevar a cabo un trabajo de cultivo con vid internacional en Abruzzo . En el caso de Masciarelli Marina Cvetic Chardonnay Colline Teatine, se trata de un vino de chardonnay que fue plantado por el propio Gianni Masciarelli en Abruzzo a mediados de los años 80 para demostrar todo el poderío de la región. Procedente de cepas de 18-20 años plantadas en suelo arcilloso calcáreo y a 400 m s.n.m, la influencia que tienen del mar y la montaña contribuyen a la plena madurez fenólica de las uvas. El cultivo es muy respetuoso utilizando productos no agresivos y limitando el rendimiento. Una vez en bodega, las uvas son seleccionadas, despalilladas y prensadas. El mosto obtenido pasa por una criomaceración en prensa durante 12 horas y después fermenta en barrica nueva de roble francés. Finalmente permanece en barricas durante 12 meses y 12 meses más en botella.

Masciarelli Marina Cvetic Chardonnay Colline Teatine es un vino blanco que, aunque de influencia y variedad francesas, el sello Masciarelli está impregnado por todas partes. Un elegante y estructurado chardonnay al estilo “made in Italy”.