Características Santa Margherita Valdobbiandene Prosecco Superiore DOCG
El área de Conegliano-Valdobbiadene, a unos 50 Km de Venecia (en el noreste de Italia), es una de las zonas con gran tradición vinícola. Sí, ya sabemos que tratándose del país de la bota esto no es ninguna peculiaridad -en 2021 en la Península Itálica se produjeron un total de 50,2 millones de hectolitros, (lo que supone el 19,3% de todo el vino mundial)-; no obstante, muy pocas pueden presumir de remontarse a tiempos de los romanos y constituirse actualmente como una denominación. Hoy en día la D.O.C.G. Valdobbiadene Prosecco Superiore es el hogar de espumosos maravillosos, como Santa Margherita Valdobbiandene Prosecco Superiore DOCG.
La bodega Santa Margherita, fundadas en 1935 por Gaetano Marzotto, fue la primera en creer en el potencial de este territorio que es único en el mundo por tres motivos: su suelo, el clima y la forma de trabajar. La zona de Conegliano-Valdobbiadene se nutre de suelos muy antiguos, ricos en lechos marinos y lacustres, en una zona prealpina, con colinas y valles, que afortunadamente hoy en día está poco contaminada. Aquí Santa Margherita posee 43 Rives, pequeños viñedos situados en las laderas más pronunciadas. Las margas y areniscas se muestran como el lugar perfecto para la glera, variedad autóctona de la zona, que se ve favorecida por las lluvias (que drenan por las laderas) y las brisas cálidas que permiten que los racimos se sequen rápidamente. Asimismo, la maduración está más que garantizada con la exposición solar y los contrastes térmicos entre el día y la noche, fruto de las distintas alturas a la que crecen los viñedos (entre los 100 y 500 metros sobre el nivel del mar). Estas altas ubicaciones determinan firmemente las forma de trabajar, siempre de forma manual, siguiendo los contornos naturales del paisaje y basados en un componente indiscutible de disciplina y duro trabajo.
Teniendo en cuenta todos estos factores de aquí no puede salir otra cosa que no sea el prosecco “mas exclusivo”, como Santa Margherita Valdobbiandene Prosecco Superiore DOCG. Tras la vendimia (realizada a mediados de septiembre) y el prensado, Santa Margherita Valdobbiandene Prosecco Superiore DOCG fermenta y se consigue el vino base que posteriormente será introducido en los autoclaves, donde se llevará a cabo la segunda fermentación. A diferencia de los métodos más tradicionales (que ocurren en botella), este método -conocido como Metodo Martinotti-Charmat– se lleva a cabo en tanques presurizados a una temperatura y una presión controladas con la adición de azúcares y levaduras. De esta forma, entre 18 y 20 días, se consigue alcanzar la presión deseada y se deje enfriar para detener la fermentación y conseguir estabilizar el espumoso. Por último, para un resultado mucho más natural, Santa Margherita Valdobbiandene Prosecco Superiore DOCG se deja durante un mes en estos autoclaves, en contacto con sus lías, antes de ser embotellado. ¡Todo un lujo único en el mundo a un precio accesible!





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