William Fèvre Chablis 1er Cru Montée De Tonnerre 2018

William Fèvre siempre ha tenido una gran reputación como defensor de los terruños de renombre histórico. Según su filosofía cada suelo tiene una identidad y autenticidad propia que pasa a los vinos, notándose en cada botella o copa. Entre las 78 hectáreas que Fèvre trabaja en Chablis (en el norte de Francia, muy cerca de Champagne) existen pequeños terrenos, conocidos como climats, que también son históricos. En concreto, dentro de sus 15,9 hectáreas clasificadas como Premier Cru se encuentra el Montée de Tonnerre, una colina que toma su nombre de la calzada romana que conecta Tonnerre con Auxerre. Sin embargo, en términos vitivinícolas, este enclave es conocido por sus condiciones climáticas, gracias a las cuales se producen vinos de gran calidad, como William Fèvre Chablis 1er Cru Montée de Tonnerre.

William Fèvre Chablis 1er Cru Montée de Tonnerre es un blanco, elaborado con chardonnay, que nace en este monte (ubicado en el este de la denominación). En este enclave, con orientación oeste (donde el sol incide por la tarde y se resguarda del viento del este), las uvas maduran con facilidad en suelos pocos profundos, revestidos de piedra caliza margosa (conocido como kimmeridge) y con vetas de arcilla azul.

Las uvas se cuidan meticulosamente en Domaine William Fèvre, donde cualquier operación en bodega se realiza por gravedad, consiguiendo así evitar la oxidación de la pasta de vendimia. Tras la vendimia manual, los racimos se prensan suavemente y pasan a un depósito donde desfangará. Una vez limpio, la mitad de la partida William Fèvre Chablis 1er Cru Montée de Tonnerre realizará tanto la fermentación alcohólica como la maloláctica de forma natural y espontánea en barricas de roble francés (con una media de 6 años). El resto lo hará en depósitos de acero inoxidable. Finalmente, William Fèvre Chablis 1er Cru Montée de Tonnerre tendrá una crianza entre 13 y 14 meses (5-6 de ellos sobre lías finas) en barricas de roble francés.